PUERTA sevilla

Localizada al Suroeste del casco antiguo Cordobés, muy cerca del Puente de San Rafael, la Puerta Sevilla es una de las ancestrales puertas que daba acceso a dentro de la muralla Córdoba. Su denominación viene dada así porque era la salida más directa para emprender un viaje a la ciudad de la vecina Sevilla.

localizaciones en el tiempo

Esta puerta es el acceso al histórico barrio del Alcázar Viejo, también llamado el barrio de San Basilio, denominado así por el antiguo convento de monjes basilios que estaba localizado en este barrio, del cual solo queda la iglesia, conocida hoy como la Parroquia de Nuestra Señora de la Paz. Destacando también esta zona por sus numerosos patios y sus bellas zonas ajardinadas. 

Es curioso mencionar que originalmente esta puerta estaba localizada en otro punto de la ciudad de la que se encuentra actualmente. La antigua Puerta de Drogueros, que es como era conocida la puerta en época califal, o denominada “Bab al-Ishbiliya o Bab al-Attarin”, estaba situada junto a las Caballerizas Reales y próximo al Alcázar de los Reyes Cristianos, donde discurría entonces el tramo de la muralla. Cuando es necesaria la ampliación del recinto amurallado hacia el Oeste, la antigua puerta se reubica en el punto actual. 

Sabías que…

La Puerta era, parece ser, un sitio para la reunión de mujeres, también un punto de encuentro para encaminarse has el Zoco Gran de Córdoba, el cual fue destruido en la “Fitna”, o guerra civil, de al-Ándalus. Tras la ocupación cristiana, esa zona pasa a ser el corral de los ballesteros, y la puerta de Drogueras empieza a ser referida como Puerta de Sevilla en los primeros años de la reconquista cristiana.

la puerta hoy

Hay que mencionar también, que la puerta que actualmente podemos ver en la actualidad, fue reconstruida en 1958, tras antes haber sido demolida en el pasado por ajustes urbanísticos poco acertados, y nuevamente alzada sobre el lienzo de protección del siglo XIV.

estructura

La Puerta Sevilla no es especialmente grande de tamaño y presenta un esquema sencillo. Cuenta con un único vano de acceso adintelado no especialmente elevado, y sin pocos más elementos decorativos salvo pequeñas placas de granito, aunque el observador avispado puede contemplar en la zona más elevada y a modo de corona, grabado en piedra, el escudo de la ciudad de Córdoba.

torreón

No lejos de la Puerta, se encuentra una estructura que consiste una pequeña torre cuadrangular, unida a dos pequeños arcos gemelos de herradura, adosados de manera perpendicular al muro que pasa por la puerta. Durante mucho tiempo ha habido debate por parte de los investigadores sobre la funcionalidad de esta estructura. Mientras que estudios contemporáneos sugieren la posibilidad de que los arcos respondan a un antiguo acueducto de época califal, en la actualidad, es cada vez más aceptada la teoría de que se trate de una torre albarrana, y que al igual que la muralla, datan del siglo XIV.

Torreón

estatua de ibn hazm

A los pies del torreón, y custodiado por los arcos, se encuentra una escultura de bronce a pie que representa a Ibn Hazm, el cual era un filósofo, poeta, historiador y teólogo entre otras disciplinas. Conocido también entre los cristianos como Aben Hazan, nació en Córdoba en 994 y se le conoce como uno de los grandes pensadores durante el Califato Omeya. La estatua se realizó en 1963 a manos del escultor Mateo Ruiz Olmos, la cual conmemora y homenajea al sabio polifacético. Destaca en la escultura sosteniendo en su mano un rollo con su obra más famosa “El collar de la Paloma”, o Tawq al-hamāma, un tratado filosófico que trata sobre el amor, reflexionando sobre la esencia de este sentimiento en distintas civilizaciones y época históricas.

Estatua d Ibn Hazm

tumba romana

Su localización actual no corresponde a su origen. Descubierta en el 1931 por Enrique Romero de Torres, el cual fue director del Museo de Bellas Artes de Córdoba, durante unas excavaciones arqueológicas efectuadas por lo zona que se conoce ahora como Ciudad Jardín,  concretamente en el cruce de las calles Infanta Doña María y Antonio Maura. 

Tras su hallazgo, se tomó la decisión de trasladarlo, siendo necesaria su desmantelación, al Museo Arqueológico Provincial. Sin embargo, y durante los trabajos de restauración de la muralla, en el año 1960 volvió a cambiar de ubicación, instalándose en el lugar actual donde hoy podemos verlo.

La tumba está datada alrededor de la segunda mitad del siglo I d.C. durante el periodo de esplendor de la ciudad como Colonia Patricia Romana. Es de planta cuadrada, cuña cámara es un bóveda de cañón y un arco de medio punto en la puerta de acceso, la cual, por las muescas encontradas en ella, se cerraría mediante una reja de hierro. Con una altura de 3,70 metros de lado por 4 metros de alto, para su construcción se utilizó un tipo de obra de mortero de estilo romano, el “Opus Quadratum”, la cual consiste en usar piedras de todo tipo con una apariencia similar al hormigón, utilizando en este caso piedra caliza local.

saqueo de la tumba

Desgraciadamente la tumba fue saqueada en la antigüedad y quedaron pocos restos de quienes descansaban en su interior. Pese a esto, se encontraron diversos tipos de ajuar en su interior como dos urnas con tapas, sin asas y pintadas, un punzón de hueso y trozos de Terra sigilata, elementos que se encuentra en el Museo Arqueológico, y que las teorías apuntan a que en la tumba se llevó a cabo distintas cremaciones con sus respectivas urnas. Y aunque la tumba no se encuentra en su punto exacto y original, si representa la costumbre romana de realizar ritos funerarios a extramuros de la ciudad sobreviviendo al paso del tiempo y a las adversidades que ha sufrido.